viernes, 26 de julio de 2013

COPENHAGUE-DINAMARCA

Llegamos a COPENHAGUE, en horas de la tarde, alojándonos en el hotal Scandic Sydhavn. Esta primera ciudad nórdica, con su gente trajeada predominantemente de color negro, nos dió la bienvenida en nuestra primera caminata, con un gesto de violencia física de un nativo hacia nuestro amigo Juan, quien se vió sorprendido al igual que el resto del grupo, por cuanto en ningún momento hubo ni siquiera cruce de palabras, sin embargo todo transcurrió con normalidad,  pensando todos al final que se trataba de una confusión por parte del agresor. El impase paso al olvido y continuamos nuestra caminata por las principales calles de la capital, hasta caer la tarde, cuando antes de cenar nos dirigimos a una Iglesia Católica donde nos dispusimos a escuchar la Santa Misa en danés.
Ese mismo día 15 por la tarde y en los dos días siguientes, anduvimos con nuestra guía conociendo los sitios turísticos más importantes de la ciudad, los cuales sin lugar a dudas, lo constituyen: su antiguo puerto llamado Puerto Nyhaun,  sus antiquísimos Palacios, entre estos el Palacio de Amalionvork; donde desde 1967 la reina Margarita II, actual reina danesa, comenzó a vivir allí en la temporada de invierno, las típicas casas del siglo XVIII  íconos de esta ciudad, la casa de gobierno, la Casa Naviera de Copenhague, la histórica Iglesia de Federico VII con la cúpula más antigua de Escandinavia, la Guardia Real de Dinamarca, el  yate Skat; la fuente de la Diosa Gefión; Diosa de la fertilidad, la Iglesia Anglicana de San Albano, el Castillo de Frederiksborg; el cual ha albergado el Museo de Historia Nacional de Dinamarca desde 1.878, es el símbolo de la monarquía danesa, de estilo barroco y actualmente es una Iglesia, el Palacio de Kronborg,y su fastuoso techo, el Museo Estatal, sin faltar por supuesto la típica escultura de la Sirenita símbolo de gran significación para los navieros daneses. Sitios estos, que luego de seis años de haberlos visitado, continúan siendo de total deleite a través de bellas fotos. Difrutémoslas y no olvidemos; que recordar es vivir. 

























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