TAJ MAHAL y EL FUERTE AGRA

Este dia 8 de diciembre, nos tocaba visitar una de las siete maravillas del mundo moderno, el TAJ MAHAL, llamado comunmente el monumento al amor. Espectacular y magna obra mandada a construir por el emperador musulman  Shah Jahan, de la dinastía mogol, en honor a su esposa favorita, conocida como MUMTZ MAHAL,  quien murió, dando a luz su hija número catorce. Su construcción tardó 22 años y trabajaron unos 20.000 obreros, es considerado el mas bello ejemplo de la arquitectura mogola, todo construido en marmol blanco y piedras preciosas incrustadas en sus paredes y en donde se combinan elementos de la arquitectura islámica, persa, india e incluso turca, y alli, descansan los restos del emperador JAHAN y su esposa MAHAL.

Ese mismo día, en horas de la tarde, visitamos el FUERTE AGRA, impresionante construcción del siglo XVI, tambien de estilo mogol, se eleva a la orilla derecha del rio Yamuna. Fue mandado a construir por el emperador Akbar; abuelo de Sha Jan (el que mandó a construir el Taj Majal). Primero comenzó siendo una fortaleza militar y luego pasó a ser parcialmente un Palacio. El emperador Sha Jahan, pasó el resto de su vida en esta construcción palaciega, divisando a lo lejos el Taj Mahal; ultima morada de su esposa alli mismo murió, habiendo estado en cautiverio 7 años, luego de hacerlo preso uno de sus hijos. Desde aquí, hay una vista espectacular del Taj Mahal.

Paso a contarles una anedocta, que vivimos esa misma noche Efrain y yo: pedimos información en el hotel sobre si habría cerca una farmacia, y efectivamente, sí había una como  a dos cuadras, pero nos sugirieron a alguien, para que nos acompañara. Yo, particularmente pensé, que sería por razones de seguridad que debíamos ir acompañados, pero cuando intentamos cruzar la esquina de la calle en sentido diagonal, pudimos comprobar, que solos, no hubiésemos podido hacerlo nunca, era mision imposible; el congestionamiento vehicular era algo de otro mundo, total anarquía, miles de cruces simultaneos, más las carretas, las bici, las motos, los tuk-tuk, las vacas, los autobuses, los carros, todos queriendo pasar al mismo tiempo. Realmente, debemos reconocer, que sin la compañía de un peatón experimentado no hubiesemos podido lograr el objetivo.