jueves, 23 de mayo de 2013

PASEANDO POR VALENCIA


En esta visita a Valencia , tuve la oportunidad de disfrutar de tres conciertos  en el Café Pub Murnau,  cálido lugar recién abierto, se trata de un pequeño cafe-bar muy bien decorado y atendido por su propia dueña, María; una interiorista de profesión quien encontró en esto una gustosa salida a la crisis y se ha propuesto presentar música en vivo de jueves a domingo, trayendo músicos y grupos amateurs pero de óptima calidad. El sitio es como dicen en España; una pasada, se está  2 o 3 horas tomando unas copitas de vino, sin comida formal, solo 3 o 4 variedades de tapas y en un ambiente súper familiar, el tema es escuchar en vivo buena música. Búsquenlo en Facebook, cuando quieran deleitarse con buena  música a través de  los vídeos allí montados.

Ese  primer fin de semana se celebra en España el día de las madres, lo pase buenísimo, mi hijo me llevó a almorzar a La Rosa Negra, restaurante  ya conocido por nosotros, por cierto de un chico venezolano, y cuyo logo y aviso publicitario es creación de mi hijo. Durante las dos  semanas en Valencia me dediqué a descansar, compartir con Marco Antonio y " trabajar" en mi  blog. Visité la bellísima Iglesia de San Martín, y luego  la Iglesia de Nuestra Señora de los Desamparados, Patrona de la ciudad, pudiendo observar la elaboración en pétalos naturales de diferentes flores, del majestuoso y artístico tapiz en honor a la Virgen, del tamaño del frente de la Iglesia. 
Participé de la celebración de la Santa Misa, en cuya homilía, el sacerdote explicó bellamente la simbología de los 3 signos iconográficos de la imagen de La Virgen de los Desamparados, que son: El Manto, protegiendo bajo éste, tal y como cuenta la historia de esta imagen a todos los desamparados: presos, pobres, prostitutas, inmigrantes y en general a toda persona que en determinados momentos se pueda encontrar en situación de desamparo, las Manos, las cuales llevan en la izquierda la imagen del Niño, cargando una cruz de madera y en la derecha un ramillete  de lirios  y azucenas como  símbolo de  pureza y por último los Ojos y a través de estos Su mirada, la cual es muy particular porque es una mirada directa a quien la busca y necesita, sintiéndose desamparado. 
Caminé de nuevo durante este viaje el centro de esta ciudad,  imponentes y hermosos sitios, observando  con detenimiento una vez más; el edificio del Ayuntamiento, la Catedral, La plaza de la Reina, la antigua puerta de la ciudad llamada Puerta al Mar, el Puente Calatrava, el paseo peatonal por lo que era el cauce  del río Turia, el Banco de Valencia,  confirmando una vez mas la historia y la belleza que se conjungan en ésta,  la vieja Valencia del Rey.
















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